MI VIEJITA MARIA por MAGDA PLAZAS

 

Amada viejita de cabello y ojos negros como el azabache,

viejita

Mi dulce ancestra carácter fuerte, laboriosa, más dulce que la miel.

Manos con rústicos caminos que labraste sin saber, saber que dan los libros, pero a ti la vida te los dio.

Heredera de noble legado, huérfana de padre y madre adoptada por el inclemente frio del cocuy.

María dulce, fuerte

María,

acechada por la despiadada violencia 

salvada por tu instinto.

Malicia indígena que brota por tus venas.

Manos laboriosas que tejieron y dieron vida.

María… fuerte guerrera mi dulce y amada abuela…

 María